Ante una situación inesperada y excepcional, como fue la irrupción de la pandemia COVID-19 durante 2020, el Gobierno nacional decidió asegurar la conectividad de toda la población al establecer, a través del Decreto de Necesidad y Urgencia (DNU) 690/20, que los servicios de telefonía móvil y fija, Internet y TV por cable sean servicios públicos esenciales y estratégicos en competencia, siendo ENACOM el organismo encargado de consensuar con las empresas prestadoras los futuros aumentos o adecuaciones de precios.

Esta medida, que tiene como objetivo garantizar el derecho humano al acceso a las TIC y a la comunicación por cualquiera de sus plataformas, requiere de un rol activo del Estado para asegurar el acceso equitativo, justo y a precios razonables para usuarios y usuarias. Asimismo, protege el principio de competencia, por lo que se procura generar eficiencia y rentabilidad económica para las empresas, pero resguardando el interés público de un mercado que, por su naturaleza, tiende a la concentración y la integración vertical del negocio.

En concordancia con esta decisión, el Poder Ejecutivo Nacional estableció la Prestación Básica Universal y Obligatoria (PBU) para cada uno de dichos servicios –con precios regulados por ENACOM–, los que corresponde brindar a las empresas en condiciones de igualdad. La PBU fue una decisión trascendental en nuestro país y persigue el horizonte de la expansión de derechos establecidos por el Gobierno nacional como lineamiento general para asegurar que todos los argentinos y argentinas gocen de las mismas oportunidades.

Siguiendo el mismo objetivo, ENACOM trabaja fuertemente en distintas políticas públicas que buscan fortalecer el despliegue de redes de conectividad. En este sentido, desde comienzo de 2020 a la fecha, ha destinado más de 13.900 millones de pesos del Fondo Fiduciario de Servicio Universal (FFSU) en programas de financiamiento a PyMES y cooperativas de telecomunicaciones para el despliegue y reconversión de redes de fibra óptica en zonas alejadas de los centros urbanos, barrios populares e instituciones públicas dedicadas a la educación, la salud y la seguridad. También ha financiado a través de ARSAT el aumento de la capacidad instalada de la Red Federal de Fibra Óptica (REFEFO) y ha trabajado junto con distintos municipios del Área Metropolitana de Buenos Aires (AMBA) en programas de conectividad para parques industriales.

Como es posible observar, si por el lado de la demanda buscamos un esquema de precios que no ahogue la inversión, pero tampoco el bolsillo de las y los usuarios, por el lado de la oferta somos un socio estratégico del sector privado, ya que cada peso que se invierte del FFSU hace crecer la red de banda ancha del país, infraestructura sobre la que se monta cualquier estrategia de desarrollo económico, social y cultural en el siglo XXI.

Por estas razones, ENACOM trabaja conscientemente para atender las necesidades y problemáticas de corto y largo plazo. La coyuntura obliga a acelerar los procesos que ya están en marcha, pero no impide que se continúe el objetivo marcado por el Gobierno nacional: empezar por los últimos para llegar a todos.

El Día de Internet, también conocido como Día Mundial de las Telecomunicaciones y de la Sociedad de la Información, se celebra en todo el mundo los 17 de mayo para promover la importancia de la utilización de las Tecnologías de la Información y las Comunicaciones (TIC), la reducción de la brecha digital, y las diversas problemáticas y oportunidades relacionados con la sociedad de la información.

Desde ENACOM celebramos esta fecha, y felicitamos y alentamos a todas y todos los involucrados en la construcción, desarrollo y expansión del canal de comunicación más amplio y democrático de la historia.