El Ente Nacional de Comunicaciones (Enacom) donó hoy más de 4 mil rezagos postales a entidades de bien público y establecimientos escolares en el marco de la Ley de Correos N°20.216 y el Decreto N°151 que habilita y prevé esta acción solidaria.

Toda aquella correspondencia o encomienda que queda en depósito de los operadores postales sin reclamo de propiedad, es clasificada y depositada en guarda durante cierto tiempo, luego cumplido ese plazo, el regulador puede disponer la entrega de dichos objetos a entidades de bien público, a través del ministerio de Desarrollo Social.

La donación abarca, en esta oportunidad, una partida de libros, útiles escolares, juguetes e indumentaria y sus destinatarios de la acción solidaria fueron escogidos con la participación del ministerio de Desarrollo de la Nación se llevó a cabo dentro de los parámetros del artículo 20 de la norma mencionada anteriormente que establece que cuando los envíos postales no pueden ser entregados a sus destinatarios, y tampoco pueden devolverse a los remitentes, deben ser declarados caídos en rezago.

En este sentido, por la Resolución de la entonces Comisión Nacional de Comunicaciones (CNC) N°2504/2003 se aprobaron las normas operativas para el procedimiento de apertura de envíos caídos en esa situación y se tuvo en cuenta la disposición que habilita al Enacom a que pueda determinar el destino final de los elementos u objetos cuyo valor no justifique su subasta.

El Material donado incluye un lote de 413 objetos entre libros, juguetes y artículos deportivos, otro de 3377 unidades de ropa, calzado y blanquería y 271 de útiles escolares, carteras y mochilas, entre otros artículos.

Las instituciones escolares y de bien público que recibieron la donación son: la Casa del Niño Amanecer, jardín y apoyo escolar de primaria al que asisten 500 niños, el Instituto Parroquial San Pedro Claver, al que concurren 900 alumnos, el Centro de Asistencia Integral San Juan Bautista para 170 adolescentes y jóvenes, la Casa de Jóvenes Levántate y Camina, que es un centro de recuperación dónde asisten 40 jóvenes y Cáritas, institución que asiste a más de 250 familias del barrio San Lorenzo.